¿Sabías que la iluminación de tu hogar puede afectar tu bienestar y salud? Existe una forma de aplicar el diseño de iluminación WELLNESS para mejorar tu hogar y tu calidad de vida.
Para mí, la luz es uno de los elementos más importantes al diseñar un espacio. Hace unos años, hice algunos cambios en mi hogar y me enfoqué en la luz, tanto natural como artificial.
La luz natural es crucial para el bienestar, ya que marca las diferentes horas del día. El amanecer lo disfruto desde el balcón, donde hago yoga y disfruto de un mate. A medida que el día avanza, el sol va iluminando otros ambientes, como la cocina y el playroom, y finalmente el living dónde rebota la luz bien dorada desde la doble altura del playroom, creando un ambiente cálido y feliz para finalizar el día en familia.
La luz natural se va apagando con el sol, pero diseñé muchas opciones de luz artificial para seguir creando diferentes situaciones y percepciones del espacio.
Luz directa sobre cocina, mesa comedor y ratona. Pero también luces indirectas con una garganta hacia el techo en doble altura, luces decorativas en zócalos y escalera. Son un montón de posibilidades, para crear un espacio que se transforma según lo que necesitemos, generando diferentes situaciones y percepciones del mismo espacio.
Con este recorrido de cómo va la luz recorriendo mi casa, quiero apuntar a la importancia en nuestro ritmo de vida, la luz solar y nuestras actividades, con el ritmo circadiano.
Es importante tener en cuenta el ritmo circadiano, que es un ciclo biológico que regula nuestro cuerpo, su vigilia y sueño, y que está marcado por la luz solar. Es fundamental que las luces nocturnas en nuestro hogar puedan dimerizarse y crear diferentes tipos de iluminación para no alterar nuestro ciclo circadiano.
Por ejemplo: en mi hogar después de comer, nos gusta ver algo de televisión, pero siempre bajamos la luz para no interrumpir el ritmo circadiano. También es importante aprovechar la luz natural en nuestro hogar y usar iluminación adaptable para cambiar la intensidad y el color de la luz según la hora del día.
¿Y qué cosas podemos hacer para mejorar nuestro bienestar en nuestra casa con luz?
Iluminación natural: Asegúrate de aprovechar la luz natural en tu hogar. Si es posible, agrega ventanas o puertas de vidrio para maximizar la entrada de luz natural. Si tienes habitaciones que no reciben mucha luz natural, considera pintar las paredes de colores claros para reflejar la luz.
Iluminación artificial: Usa luces LED que puedan cambiar de color e intensidad a lo largo del día, para simular la luz natural. También puedes usar iluminación indirecta para crear un ambiente más relajante. Y recuerda, usa lámparas de mesa o luces de lectura en lugar de luces brillantes en el techo en tu dormitorio para evitar interrumpir tu ciclo circadiano.
Iluminación focal: Usa la iluminación para destacar las áreas clave de tu hogar. Por ejemplo, puedes usar luces dirigidas a una obra de arte o un mueble para hacerlo destacar.
Iluminación adaptable: Usa un sistema de iluminación adaptable para cambiar la intensidad y el color de la luz según la hora del día. Esto puede ayudarte a mantener tu ritmo circadiano y mejorar tu sueño.